sábado, 1 de septiembre de 2007

¿Mediocre juventud?


ajja esta si que la saqué del baul de los recuerdos...de la vieja escuela o similares jajaja...es un ensayo que hice cuando estaba mas o menos en 2º o 3º medio (tenia 16-17 años)...algunas de mis opiniones han cambiado al respecto...habrá pasado lo que yo misma predicaba que no debia suceder?
bueno eso no lo se...aqui les va...pueden reirse...mofarse...y criticar obviamente...


Actualmente el concepto de jóvenes por el resto de la sociedad no es muy bien visto, ya sea de modo político o por la “sociedad adulta”, pero si realmente se detuvieran a pensar por sólo un segundo... que es lo que esta ocurriendo en nuestras vidas, los cambios que estamos viviendo y todo lo que conlleva a ser joven... No aseguro que dirían lo mismo.
Por lo general la sociedad chilena, al igual que las demás sociedades, en caso de excepciones (que son las menos) nos ven como una juventud mediocre y deteriorada, que no aporta nada para la sociedad, y que simplemente deberíamos crecer lo mas antes posible, para así poder razonar íntegramente como un adulto.

Actualmente la sociedad chilena esta sufriendo cambios, y eso se ve muy marcado en esta etapa, en la juventud, donde realmente nos determinamos como personas socialmente aceptadas y nos intentamos de mimetizar con el mundo adulto.
Si bien es cierto, como jóvenes; algunas o muchas veces somos algo irresponsables, todos sabemos muy bien cuales son las reglas y cuando nos vemos involucrados en conflictos que nosotros mismos creamos, nos sentimos desprotegidos y necesitamos la ayuda de nuestros padres, pero en la actualidad, en este mundo neoliberalista, donde el tiempo es dinero, y el consumismo y el ser “trabajolico” esta de moda, solo quedan las sobras para la familia y es allí donde se desarrollan los grandes problemas.

Nos sentimos desamparados, ya que nadie nos entiende, ni apoya, por ello buscamos refugio en nuestros pares, en las personas que viven y sufren nuestros mismos problemas, nos ayudamos y apoyamos unos a otros, buscando la forma de salir del problema. Nadie dice que eso sea malo, lo malo esta cuando la salida de los problemas es otro, cuando no encontramos otra salida y elegimos mal, nos equivocamos, si bien es cierto, esta es la edad donde todos nos podemos equivocar, pero las secuelas de esos pequeños errores nos pueden marcar para toda la vida.

Eso se ve reflejado en la delincuencia, el alcoholismo, la prostitución, la drogadicción etc, Nos vemos desamparados y nadie nos escucha, sobre todo cuando el vínculo familiar, el núcleo familiar no existe, los problemas y la debilidad para acercarnos a los malos hábitos se hace mucho mayor, luego los políticos no nos escuchan y tomamos nosotros mismos las riendas del asunto muchas veces sin tener muy claro, quienes o qué lo provocó.

Por eso los jóvenes sufrimos las consecuencias, no queremos casarnos, porque vemos y vivenciamos día a día los grandes errores de nuestros padres, y no queremos cometerlos igual, no queremos que nuestras vidas se parezcan a las de los adultos, que vemos, muchos de ellos frustrados y sin la capacidad de sentirse plenos consigo mismos, buscamos nuestras propias emociones, porque las emociones de la vida moderna están un poco marchitas y por ello, hacemos lo necesario, somos aventureros, no nos importa mucho las consecuencia que ello traiga, con tal de sentirnos diferentes, de escaparnos de la rutina, de poder ser nosotros mismos y soltarnos de las ataduras que el mundo nos da, buscamos esa anhelada e imposible libertad, de una u otra forma lo intentamos, pero como somos muy sensibles, nos sentimos frustrados, nos deprimimos fácilmente, muchas veces llegando a tomar decisiones drásticas; que en algunos casos puede llevarnos a la muerte.

Buscamos distraernos y para ello queremos salirnos un poco del protocolo para sentirnos diferentes, ser diferentes del resto de la sociedad, con menos responsabilidades, creemos saber cuidarnos solos, porque queremos ser independientes, en algunos aspectos, tratamos de imitar a como de lugar a los adultos para tener ciertos privilegios que a nosotros nos son negados.
Si se trata de experimentar, no nos negamos a nada, si es necesario consumir drogas para sentirse liberado lo hacemos, porque queremos huir de los problemas, de nuestra propia realidad, de la triste realidad y decadencia de la sociedad actual, nos deprime ver cada día, como hombres llegan a sacrificar miles de vida tan sólo por una riqueza monetaria, material, sin sentido. Vemos al mundo, como se nos presenta frívolamente, y buscamos el amor, el sexo, ya sea por diversión deseo o sentimientos. Lo tomamos como un juego a la ligera, y muchas veces no tomamos las precauciones necesarias, lo que en algunos casos nos lleva a la perdida de nuestra juventud, con los embarazos adolescentes o a contraer enfermedades de transmisión sexual a una muy temprana edad, pero es en los estratos mas desposeídos donde se ve la cruda realidad y todos pierden sus sueños, sus ideales, tienen que sobrevivir con el mundo frívolo que los rechaza y marca de por vida.

La frustración resurge y se ven desposeídos, buscando una identidad propia, buscando ser alguien y dejar una huella en la vida, aunque sea una pequeñita, pero nadie les da la oportunidad para demostrar quienes son y lo que son capaces de hacer, porque simplemente no son ellos los privilegiados, no son ellos los elegidos y la sociedad se lo grita cruelmente, por lo que no demoran mucho en internalizarlo en sus mentes, ahogando poco a poco la esperanza de poder ser alguien mejor y de cambiar un poco la sociedad, para que el mundo se detenga un poco y analice lo que estamos viviendo, y porque lo estamos viviendo, que se de tiempo de pensar, que no sea tan autómata, pero lentamente se van confundiendo con el mundo adulto, rápidamente crecemos y somos adultos y seguimos con el ciclo, se nos olvidan todos nuestros sueños de un mundo idealizado, de un mundo mas caritativo, mas solidario, y aceptamos los valores y todo lo que se nos entregó desde niños, automáticamente continuamos con la vida, sin hacer un nuevo espacio, un cambio, sólo preocupándonos de nosotros mismos y siendo cada vez mas unipersonales, nos encerramos en nosotros mismos, porque pensamos que el otro tiene mas problemas que nosotros y que no es justo que el tenga que soportar escuchar otro mas, cargamos con nuestras culpas y lamentos sin que nadie se de cuenta.

Intentamos acercarnos a Dios, pero cada vez nos sentimos tan decepcionados de todo, que llegamos a la conclusión de estar solos en el mundo, de que cuando somos jóvenes nadie nos entiende y comprende, solo nos usan como modelo comercial para vender mas y tener mas dinero, nos materializan, nos imparten lentamente sus ideas hasta que terminamos aceptándolas, nos volvemos pasivos y continuamos con todo ello, porque cuando somos jóvenes nos niegan la posibilidad de aportar, de con todas las ganas y el vigor que tenemos a nuestra edad, para primero moldearnos tal cual como ellos, pero nosotros insistimos, luchamos contra ello, somos rebeldes, no aceptamos que nos hagan eso y estamos dispuestos a luchar por ello, a ser afectivos, no nos resignamos, buscamos acogida en nuestros pares, tenemos mas y mas amigos, buscamos a esa comunidad primitiva, donde los lazos se creaban por semejanzas y no por conveniencias, no somos mediocres, ellos dicen que lo somos, cuando en realidad no se dan cuenta de la verdad, de su propia realidad, que están envueltos en un círculo vicioso y que nunca siquiera intentaron salir de ahí, nosotros no nos rendimos, creamos nuestras propias culturas, para que no nos entiendan y nos sentimos felices así, porque ya nos resignamos a no ser escuchados y atendidos por ellos, asi que...simplemente los ignoramos, hacemos como si no existieran y hacemos oídos sordos a sus “grandes propuestas” que no nos identifican y que sólo piensan en su mundo, en su realidad, es ahí cuando se enojan, se irritan, se preocupan de “nuestra degradación”, de nuestros problemas, cuando ya no necesitamos de su ayuda y somos felices con nosotros mismos, ahí vienen a ayudarnos, con enojo, porque no estamos dentro de sus parámetros, no seguimos el protocolo, no somos igual a ellos, por lo que se preocupan de inmediato y hacen todo lo posible e imposible para insertarnos, lo malo es que a veces lo logran, y ya no tenemos nada que decir al respecto.

1 comentario:

Jose dijo...

no veo oprke criticra fueo capaz sigue siendo tu punto de vista esao keria saber si sigues pensando igual o en algo ha variado porke a mi parce muy realista
saludos jzleuz